Y es que estoy metida en estas cuatro paredes, lejos de esas personitas. Siento que no hago nada, que se me echa el tiempo encima. Porque tengo millones de cosas por hacer, y se me escapa el tiempo en este vacío aparentemente atemporal. Nunca pensé que lo diría, pero si esto es el verano, prefiero ir al colegio. Pero todavía queda agosto.
Música de fondo: